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lunes, 27 de julio de 2009

¡El Gato duerme en su Cama o Camina sobre la Mesa del Comedor?

¿El gato duerme en su cama o camina sobre la mesa del comedor? ¿Le molesta que lo haga? Hay formas de evitar esto.

Cuando viven entre humanos, los gatos se adaptan perfectamente a nuestros hábitos, algunas veces quizás de forma muy perfecta. Por ejemplo, ellos pueden querer compartir no sólo nuestra casa, sino también nuestros alimentos y nuestras camas. Para evitar que su gato ingiera la comida de las personas de la casa, usted necesitará ser consistente y utilizar unos cuantos trucos pequeños.


Cada vez que usted encuentre a su gato caminando sobre la mesa del comedor, levántelo suavemente y colóquelo en el suelo, mientras le dice "no" con firmeza. Llévelo directamente a su plato de alimento, donde debe encontrar un sabroso alimento, como Whiskas®. Esto mantendrá al gato alejado de su comida, mientras que al mismo tiempo le ofrece una buena alternativa de cambio por la comida de las personas.

Igualmente, debe alimentar a su gato cada vez que usted se alimenta. Si usted no quiere que el gato duerma en su cama por las noches, sólo bájelo de la cama y colóquelo en el suelo mientras le dice "no" con firmeza. Si esto no funciona, intente mantener la puerta de su cuarto cerrada por las noches.

Por supuesto, usted tendrá que acostarse en su cama escuchando cómo su gato maúlla y rasguña en su puerta. Luego de unas cuantas noches, su gato deberá aprender que la puerta permanece cerrada y que tiene el resto de la casa para encontrar un lugar donde dormir. También ayuda si el gato tiene su propia cama cómoda para dormir.

lunes, 20 de julio de 2009

Hongos en los Gatos

Cuando las personas decidimos tener un animal de compañía, un felino doméstico por ejemplo, no debemos olvidar nuestras responsabilidades con el nuevo habitante de la casa. Aparte de darle cariño y una buena alimentación, son necesarios los controles sanitarios.El veterinario desparasitará a nuestra mascota y confirmará que esté libre de cualquier enfermedad.

Aún así, aunque nuestro gato viva dentro de casa y tenga todos los cuidados necesarios para un buen desarrollo y crecimiento, los felinos pueden padecer determinadas dolencias, entre ellas la dermatofitosis, considerada como una zoonosis. La dermatofitosis, nombre científico de la popularmente conocida como tiña felina, es una reacción dermatológica que afecta a un gran número de animales. Sin embargo, es el gato el que más riesgo tiene de contagiarse y trasmitirla con mayor facilidad.

¿Qué es la dermatofitosis?La dermatofitosis es una infección por hongos. Se ha asociado este mal a tres tipos de hongos distintos, pero sólo uno de ellos es el responsable de producir esta enfermedad, el Microsporum canis. Esta infestación micótica del tejido queratinizado afecta a uñas, pelo y piel. Los dermatofitos no pueden vivir en zonas inflamadas y donde hay pelo, por eso es habitual observar zonas sin pelo en los felinos que padecen esta patología.

Las condiciones ambientales en las que el felino viva, junto con su estado inmunitario, ayudan a desarrollar la enfermedad. La falta de higiene, el calor, la falta de luz solar junto a la desnutrición, la existencia de parásitos o el estrés en el animal son factores que pueden provocar que el gato sufra por dermatofitosis.

Conoce la sintomatología

Los síntomas más habituales que se aprecian en el animal son los siguientes: morderse y rascarse la zona afectada, problemas cutáneos y descamación, alopecia focal o generalizada y continuo lamido del gato en las partes afectadas por el dermatofito. Estas conductas agravan la enfermedad, ya que la extiende a otras áreas del cuerpo que permanecían sanas.

Las secciones más frecuentes en las que se localizan las lesiones son las orejas y las extremidades, aunque no sería extraño que aparecieran en cualquier otra parte del cuerpo. En ocasiones, la infección afecta también a las uñas, síntoma que se conoce con el nombre de onicomicosis; nos percataremos de ello porque las veremos rotas o quebradizas. Otro tipo de manifestación son los denominados keriones, nódulos cutáneos que presentan fuerte dolor en la zona.

¿Cómo se diagnostica?

Cuando el veterinario inspeccione al gato tendrá en cuenta, a parte de las lesiones, si el felino pudiese padecer otro agravio que estuviese provocando la dermatofitosis o tiña. En los gatitos puede aparecer el problema debido a una mala nutrición y una escasa o nula desparasitación, mientras que en gatos adultos la presencia de hongos indica algo más importante y serio, ya que se deben tener en cuenta enfermedades como la leucemia o la inmunodeficiencia.

Aparte de observar las dolencias, el veterinario deberá utilizar dos métodos para comprobar el estado en el que se encuentra el animal. El más efectivo es el del cultivo de uñas y pelo: es el más caro, pero resulta definitivo y fiable. Se necesitan aproximadamente diez días para obtener los resultados y emitir un diagnóstico. El problema que presenta es la lentitud del cultivo, pues en ese intervalo de tiempo, la tiña puede extenderse o incluso el animal puede haber infectado a otro animal o persona.

El otro examen, recibe el nombre de ‘lámpara de Wood’, es un tipo de iluminación que utiliza luz ultravioleta. Cuando se ve un área del cuero cabelludo infectada con tiña bajo la lámpara de Wood, el hongo brilla (fluorescente). Esta prueba se hace para detectar la presencia de una infestación en el cuero cabelludo o en la piel.

Un tratamiento muy largoAl tratar la dermatofitosis del gato, al margen de las lesiones, se tendrá en cuenta la edad del gato, las enfermedades que tenga, su sistema inmunológico y si hay riesgo de contagio a personas u otros animales.

El primer procedimiento para la tiña mientras esperamos el diagnostico es el tópico. Son limpiezas locales de la zona afectada, con productos como la povidona yodada o la violeta de genciana. Se trata de productos antisépticos, antiinfecciosos y antifúngicos, utilizados para desinfectar y curar cualquier afección en la piel.También se pueden usar pomadas o emulsiones para frenar la dermatofitosis, evitando tener que recurrir a tratamientos más agresivos.

Los tratamientos orales son bastante más tóxicos y agresivos para el organismo de nuestro gato. Consisten en la administración de varios medicamentos que, en cualquier caso, deberán ser recetados por un especialista veterinario. Hay que recordar que no debemos administrar a nuestros animales de compañía fármacos que no hayan sido prescritos porque las consecuencias pueden ser muy graves. Respetando las indicaciones veterinarias, veremos como tras un periodo de post curación clínica, nuestro gato va respondiendo al tratamiento.

Cuidado con la zoonosisLa tiña es una de las pocas enfermedades felinas que se trasmite al hombre. Los individuos de mayor riesgo son las personas con un sistema inmunológico inmaduro o inmune deprimido, es por ello, que ancianos y niños son los más propicios al contagio de dermatofitosis.

Con el fin de evitar esta peligrosa situación, os presentamos unos consejos prácticos:

Primero.- Ante la sospecha de un gato enfermo por hongos, es fundamental llevarlo al veterinario para que le realicen un estudio médico.

Segundo.- Tendremos precaución a la hora de manipular al animal y deberemos extremar esa precaución en el caso de ancianos o niños, además de tener una buena higiene.

Tercero.- Una vez diagnosticado nuestro gato con la tiña, aislaremos al felino del resto de los animales de la casa.

Cuarto.- La persona que realice las curas ha de tener una estricta higiene: utilizará guantes para las curas y se lavará las manos con povidona yodada al manejar al animal enfermo. Asimismo, los restos de pelos o escamas de la piel deben ser quemados y todos los utensilios deben ser desinfectados.

Quinto.- No es necesario sacar al gato de casa si no hay personas susceptibles al contagio.
Únicamente deberemos evitar tocar al animal demasiado hasta que éste empiece a responder al tratamiento.

Sexto.- Como hemos expuesto antes, la higiene es imprescindible. Se pasará el aspirador diariamente para retirar los pelos que pudieran tener restos de esporas infectadas de hongos.

Séptimo.- Para terminar, recordar que, aunque el gato parezca curado, no debemos suprimir el tratamiento hasta dos semanas después, ya que podría reaparecer el problema.

Alimentación de los Gatos en las distintas etapas y estilos de Vida

Alimentación de los gatos en las distintas etapas y estilos de vida

Alimentación de los gatos adultos en período de mantenimiento
Alimentación durante la preñez
Alimentación durante la lactancia
Alimentación de los gatitos

Alimentación de los gatos adultos en período de mantenimiento (Alimentación del gato maduro)

Un gato adulto con actividad normal requiere sólo una dieta de mantenimiento.

Un alimento para gatos comercial de buena calidad que sea completo y balanceado para el mantenimiento o para todas las etapas de la vida resulta apropiado para alimentar a los gatos adultos que no estén preñados o amamantando.

Los gatos deben ser alimentados como animales particulares y los factores que influyen en la cantidad de alimento que requiere un gato adulto típico para mantener una buena condición física son el nivel de actividad, la temperatura y el metabolismo corporal. Una buena condición física es aquella en que el animal está bien proporcionado, con flancos observables detrás de la caja torácica y costillas que pueden palparse con un leve recubrimiento de grasa sobre ellas.

Como los gatos tienen tendencia a comer bocados ocasionales, deben tener acceso a su alimento durante varias horas por día. Y como con otros animales, disponer de una fuente de agua fresca y limpia es importante para casi todas las funciones corporales -digestión, absorción, circulación, transporte de nutrientes, construcción de tejidos y para regular la temperatura corporal.

Los gatos requieren un nivel más alto de proteína en la dieta y un balance nutricional diferente al de los perros. Al igual que los gatitos, los gatos maduros requieren que se agregue taurina a sus dietas mientras que los perros no.

Estos singulares requerimientos de la dieta se satisfacen proporcionando a los gatos un alimento completo y balanceado y por estas razones se recomienda que a los gatos adultos no se les administre alimento para perros.

A un gato se le puede administrar una dieta de mantenimiento después del primer año de vida.

Las dietas de mantenimiento no son apropiadas para los gatitos o para las hembras preñadas o que están en período de amamantamiento.

El gato promedio de tres a cuatro kilos requiere aproximadamente 84 gr. (un tercio de una taza de 224 gr.) de alimento seco o semi húmedo, o entre 168 y 224 gr. de alimento en lata por día.

La cantidad de alimento necesaria variará de acuerdo con la densidad de nutrientes del alimento y con cada gato en particular.

Aún cuando todos los factores son iguales, dos gatos de tamaño, edad y actividad similar pueden necesitar diferentes cantidades de alimento simplemente porque tienen diferentes metabolismos.

El apetito y el consumo total de alimento de un gato variará de un día a otro. La pérdida del apetito o el desgano para comer no son problemas en los gatos adultos a menos que estos síntomas persistan durante varios días o que el gato muestre síntomas de enfermedad. Si esto sucede, el veterinario deberá examinarlo.

Alimentación durante la preñez

Si bien la nutrición es un factor clave para mantener a un gato sano, su importancia se ve realzada durante la gestación y la lactancia.

La dieta debe proporcionar los nutrientes esenciales en el equilibrio adecuado para el desarrollo de los gatitos y preparar a la hembra para la tensión de la lactancia.

Las dietas con etiquetas que indican que se pueden emplear para el mantenimiento de adultos, la alimentación intermitente o para usos terapéuticos por lo general resultan inadecuadas para la gestación y la lactancia.

Una dieta seleccionada para administrarla durante este período deberá tener una etiqueta que indique que es nutricionalmente completa y balanceada para todas las etapas de la vida del gato o para el crecimiento y la reproducción.

Esta afirmación debe ser apoyada preferentemente por los estudios sobre alimentación animal.

Se recomiendan las dietas formuladas para proporcionar por lo menos 30 por ciento de proteína y que contengan más de 1.700 kcal cada 450 gr. de alimento.

Si se administra una dieta de mantenimiento antes del servicio, debe hacerse un cambio gradual a una dieta apropiada para la reproducción durante el último trimestre de preñez.

Los criadores a veces creen que se necesitan complementos además de la dieta normal para proporcionar la nutrición extra que requieren las gatas preñadas y que amamantan.

Esta necesidad de nutrición extra puede satisfacerse administrando una dieta completa y balanceada de buena calidad, eliminando así la necesidad de complementos.

Durante toda la gestación, la hembra puede mostrar un aumento lento y firme del peso corporal y al mismo tiempo un aumento gradual en la ingesta de alimento. Los cambios hormonales y de comportamiento que ocurren durante la reproducción pueden provocar períodos de disminución, aumento o suspensión de la ingesta de alimentos.

Por ejemplo muchas gatas pasan por un breve período de pérdida parcial del apetito alrededor de la tercera semana de gestación, que dura entre 3 y 10 días. Se espera una cierta ansiedad por parte del dueño y es importante que se resista a hacer cambios en la dieta o en el programa de alimentación cada vez que se registren altibajos en la alimentación de la gata.

Sin embargo, si se prolonga la disminución en la ingesta de alimentos, o si la condición física de la hembra comienza a deteriorarse, debe ser examinada por un veterinario para detectar problemas de salud.

A medida que se acerca la parición, la hembra también puede perder el apetito. El rechazo a la comida durante la novena semana de gestación por lo general es una buena indicación de que parirá dentro de las próximas 24 a 48 horas.

Por lo general dentro de las 24 horas posteriores a la parición el apetito de la hembra aumentará lentamente.

Alimentación durante la lactancia

La demanda de leche por parte de los gatitos lactantes continuará aumentando durante aproximadamente 20 o 30 días.

Como consecuencia, los requerimientos de alimento y agua de la hembra aumentan durante este período. Puede ser que se deba alimentar a las hembras dos o tres veces por día y deberán disponer de agua fresca en un recipiente limpio.

El alimento seco debe administrarse humedecido durante la lactancia para aumentar la ingesta de alimentos y agua de la hembra y para alentar a los gatitos para que comiencen a tomar bocados de alimento sólido.

Cuando los gatitos tienen entre tres y cuatro semanas de vida, comienza el interés en el alimento sólido y disminuye el interés de la hembra en el amamantamiento (el proceso de destete está en marcha).

El alimento humedecido debe estar a disposición de los gatitos en un plato poco profundo durante varias horas por día.

El destete de los gatitos por lo general ocurre entre las 6 y 8 semanas de vida. Para las hembras que continúan manteniendo una significativa producción de leche, la congestión y el malestar de las mamas puede ser un problema.

La resolución de este problema puede acelerarse limitando la alimentación de la gata de acuerdo con el siguiente procedimiento:

Durante el primer día de destete, no se debe alimentar a la gata pero se le debe proporcionar una fuente de agua limpia. Se debe separar a los gatitos de la gata y se les debe ofrecer alimento y agua.

El alimento seco humedecido con agua tibia puede ayudar a estimular la ingesta de alimento de los gatitos. A los dos, tres y cuatro días del destete, se recomienda limitar el alimento de la gata a ¼ , ½ y ¾ de la cantidad habitual respectivamente.

Al quinto día, se debe reanudar la ingesta de alimento con la cantidad normal que ingería la gata antes de la gestación y la lactancia.

Alimentación de los gatitos

Las investigaciones muestran que un gatito pasa de la infancia a la edad adulta joven en aproximadamente un año y durante sus primeras 20 semanas (5 meses) un gatito puede tener un aumento del 2.000 por ciento en su peso de nacimiento.

A las 26 semanas de vida, la tasa de crecimiento comienza a nivelarse. Sin embargo, los gatitos continúan desarrollándose por dentro y el crecimiento normal finaliza alrededor de los 12 meses de vida. Los gatitos también requieren el doble de energía cada 450 gr. de peso corporal como un gato maduro.

Los gatitos deben estar completamente destetados a las 6 u 8 semanas y deben estar acostumbrados a una dieta normal con alimento completo y balanceado del tipo para crecimiento formulado para gatitos.

Los gatitos requieren niveles de proteína más altos que los cachorros y también tienen un requerimiento singular del aminoácido taurina.

La falta de la taurina suficiente en una dieta para gatitos puede resultar en una disminución de la visión.

Por estas y otras razones, se recomienda administrar a los gatitos sólo los alimentos desarrollados para gatitos y no para cachorros.

Cuando se ofrece un alimento nutricionalmente completo y balanceado a un gatito normal y sano, no es necesario complementar la dieta con vitaminas y minerales.

Los complementos pueden trastornar el equilibrio de nutrientes del alimento y demasiados complementos pueden resultar perjudiciales.

Se recomienda alimentar a los gatitos dos o tres veces por día durante este período de rápido crecimiento y muchos dueños les dejan alimento en todo momento con una fuente de agua fresca y limpia.

El alimento seco puede humedecerse con agua tibia para ayudar a ablandarlo y hacer que les resulte más fácil comerlo.

El alimento seco humedecido o el alimento en lata puede perder el sabor si se lo deja a temperatura ambiente e incluso pudrirse si se lo deja durante varias horas, por lo tanto, se deben retirar y desechar las porciones no ingeridas después de una hora. Como ocurre con otros animales, todos los cambios en la dieta deben realizarse en forma gradual durante un período de 7 a 10 días para evitar trastornos digestivos.

Los gatitos tienen tendencia a comer bocados ocasionales ya que toman un gran número de comidas a lo largo del día. Normalmente el gatito se acerca al alimento, lo huele rápidamente y luego comienza a comer.

Después de consumir una pequeña porción de alimento, el gatito se va y vuelve a intervalos para seguir comiendo.

No se debe confundir esta conducta con un desgano o una negación para comer. El exceso de ruido, un ambiente nuevo, la limpieza de los platos para el alimento/agua pueden ser todos factores a considerar si un gatito se niega a comer. Si se prolonga la negación y/o el gatito muestra signos de enfermedad como por ejemplo desgano, diarrea, vómitos repetidos, secreciones de los ojos o la nariz, esfuerzo para orinar o constipación o si se esconde en lugares oscuros, se debe consultar al veterinario.

De los seis meses al año, los gatitos deben ser alimentados dos veces por día si se les administra alimento en lata, semi-húmedo o seco humedecido. El alimento seco puede administrarse libremente, llenando el recipiente con una cantidad suficiente de alimento una vez por día. Sin embargo, el exceso de alimento debe evitarse.

Los gatitos deben ser alimentados como animales particulares y las cantidades administradas dependerán de la actividad y la condición física de cada uno. Es una buena idea comenzar con las cantidades recomendadas en las etiquetas de los envases y emplear esta información como guía.

Ajuste la cantidad administrada para obtener una condición física saludable. También es apropiado consultar a su veterinario cuando examine a su gatito en un chequeo rutinario de salud.

Las instrucciones de alimentación de los paquetes deben emplearse como una guía para la alimentación diaria de cualquier gato.

Los gatos activos o los expuestos al aire libre pueden requerir mayor cantidad de alimento para mantener una buena condición física.

Si un gato tiene exceso de peso, se debe disminuir su ingesta de alimento.

Un veterinario puede ayudar al dueño a evaluar la condición física del gato empleando el método de Evaluación de la Condición Física (ver página XX) y, si fuera necesario, ayudar a planificar un programa apropiado para bajar de peso. Los gatos, como las personas, tienen preferencias alimentarias individuales.

Los gatitos de una misma cría pueden adquirir diferentes gustos y hábitos de comida. Sin embargo, la reputación que tienen los gatos de ser animales con conductas alimenticias selectivas es por lo general el resultado de las prácticas de alimentación establecidas por el dueño.

Cuanta más variedad se le ofrece a un gato, más variedad esperará. Con la amplia elección de alimentos comerciales para gatos, resulta fácil proporcionar una dieta nutricionalmente completa y balanceada que un gato comerá.

La Alimentación necesaria para un gato Fuerte y Sano

La alimentación necesaria para un gato fuerte y sano . . .

Para tener un gato fuerte y sano, es fundamental que esté alimentado correctamente. Atrás quedaron los tiempos en que por ser un animal, se le alimentaba con sobras, y nuestro felino tiene unos requerimientos especiales para estar sano.

Es cierto que los gatos son un poco exigentes a la hora de comer. Cualquier cosa, como sobras, sólo las comen en raras ocasiones y más como un capricho. Esto se debe, fundamentalmente a sus necesidades nutritivas. Nuestro gato, es un comensal muy cuidadoso, que rechaza su comida si no le huele bien, o no se le sirve a la temperatura adecuada. Sus sentidos del olfato y el gusto, le permiten detectar si el alimento no es fresco.

Una de las primeras cosas que debemos aprender como propietarios de estos gourmets, es que es necesario darle de comer todos los días a la misma hora.

Puede suceder, que nuestro gato, en sus escapadas nocturnas, complemente su dieta cazando y devorando pequeñas presas, lo cual de ninguna manera significa que esté hambriento, o que aumentándole la ración de alimento, evitaremos esto. El gato caza por instinto, incluso el mejor alimentado cazará algún ratón, si se le presenta la oportunidad.

Exigencias nutritivas.

El gato , no es vegetariano, y necesita obligatoriamente nutrientes de origen animal, y es incapaz de sobrevivir mucho tiempo con una dieta completamente libre de carne.

La mejor forma de asegurarnos de que nuestro gato disfruta de una dieta equilibrada, es ofreciéndole alimentos elaborados específicamente para ellos, bien sea enlatados o alimentos secos o semi-secos, que contienen los elementos nutricionales indispensables para su nutrición.

Además, se le pueden dar alimentos frescos una o dos veces por semana, para brindarle variedad e interés a su dieta. Estos alimentos, pueden ser de carne guisada, asada, a la parrilla, o con algunas verduras, sardinas enlatadas, pollo, pescado cocido, etc., teniendo buen cuidado de retirar todas las espinas y huesos.

Siempre hay que tener en cuenta, que se deben alimentar con alimentos formulados especialmente para gatos, por ejemplo, no se le debe alimentar con el formulado para perros, ya que el gato necesita 20% más de proteínas que el perro, así como requieren de ciertas grasas animales que sólo se encuenran en carnes y pescados( como la taurina).

Los alimentos secos, deben utilizarse como parte de la dieta, teniendo en cuenta que este tipo de alimentos, aumentan los requerimientos de agua del animal. Lo más aconsejable es alternarlos con enlatados y alimentos frescos para hacer la dieta más equilibrada.

Cualquiera sea el tipo de alimentación que se utilice, nuestro gato debe disponer siempre de abundante agua fresca, para que la pueda consumir de acuerdo a sus requerimientos.

Un gato adulto normal, debería pesar entre 4 y 5 Kgs., sin embargo el peso de un gato oscila según la complexión de su raza.

Una buena alimentación, no implica un exceso de peso. Un gato con sobrepeso presenta un gran abdomen que le cuelga, respira con esfuerzo y se vuelve menos activo. Ese exceso de kilos, sobre exige al corazón, y lo hace más propenso a la artritis y otras enfermedades a medida que envejece. En algunas ocasiones se puede tratar de algún problema hormonal, pero por lo general un gato engorda, porque come mucho más de lo que necesita.

Si su gato está excedido de peso, confirme con el veterinario si no es consecuencia de un problema médico, si no es así, el especialista podrá aconsejarle cual es la mejor dieta para que su gato pierda peso, teniendo en cuenta su raza, su edad, su condición física, y naturalmente, sus propios gustos y preferencias, y recuerde, un gato con sobrepeso, tiene una esperanza de vida mucho menor que otros gatos.

Una Belleza.


Pedimos Dísculpas.

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El Editor